James Brady

James Brady

James Brady (Nueva York, EEUU, 1967) es un veterano periodista que trabajó durante años en The Washington Post, donde llegó a ser jefe de la edición digital. Más tarde asesoró al diario británico The Guardian en su expansión estadounidense, hasta que recibió una oferta laboral tan complicada como estimulante: volver a Washington DC, en esta ocasión  para competir con su antigua casa.

La empresa  Allbritton, propietaria del diario digital Politico.com, ha puesto en Brady la responsabilidad de montar un gran sitio web que cubra la información que se produce en la capital de Estados Unidos. La idea es llegar allí donde no llegan los periódicos nacionales y locales.

¿Cómo pretende conseguirlo? En una extensa entrevista telefónica con ABC.es, el futuro director de este medio -todavía sin nombre- explica la estrategia editorial y económica de su proyecto, que verá la luz en primavera, y da un repaso al periodismo impreso y digital que se ha ejercido en Estados Unidos en los últimos años. Leer más

Jeff Jarvis

La carrera periodística de Jeff Jarvis (Chicago, EEUU, 1954) es prolífica en el mundo de la prensa escrita -empezó como crítico de televisión, fundó la revista de ocio Entertainment Weekly y fue columnista del San Francisco Examiner, entre otros medios-, pero le ha conducido hasta las mismas entrañas de la prensa digital, en un momento tan prometedor como inquietante.

Actualmente, Jarvis es profesor de Periodismo en la Universidad de la Ciudad de Nueva York, autor del libro What would Google do (Qué haría Google) y bloguero del diario británico The Guardian y de su propio espacio, BuzzMachine en donde se ha convertido en una de las voces más relevantes e irreverentes de la prensa impresa y electrónica.

En una entrevista telefónica, este experto analiza la crisis de los medios en la etapa digital y propone soluciones en un proceso de incertidumbre y transformación que cree inevitable. Leer más

Simon Rogers.

Los primeros casos aparecieron hace dos años, pero no fue hasta hace dos meses cuando se descubrió la verdadera magnitud del problema. En mayo de 2009, el diario inglés The Daily Telegraph se hizo con algunos documentos oficiales que destapaban el mayor escándalo económico en toda la historia del Parlamento británico. Este rotativo publicó varios artículos en los que denunciaba el uso fraudulento de los gastos de representación de algunos parlamentarios, quienes habrían incurrido en toda clase de irregularidades contables, fiscales y laborales. El escándalo salpicó, incluso, al primer ministro Gordon Brown y provocó la dimisión del presidente de la Cámara de los Comunes, de seis miembros del Gobierno y de una docena de políticos conservadores y laboristas.

Por su parte, el diario The Guardian tuvo que esperar a que, casi dos meses después, el Parlamento hiciera públicos parte de los recibos, facturas y otros documentos en los que los diputados solicitaban, desde 2004, el pago de sus gastos de representación. Unos documentos -casi medio millón de páginas- que no incluían las peticiones de gastos denegadas y en los que habían sido borrados algunos datos personales, para proteger la intimidad de los parlamentarios.

El diario tenía que recuperar el terrreno perdido ante su rival periodístico, pero antes debía afrontar el estudio de un montón de documentos en un tiempo récord. ¿Cómo conseguirlo?

Leer más

Categorías